Los recursos aun no eran una preocupación, pero Scott creía que es mejor estar preparados, así que organizo una expedición personal con los que pilotaron el dron, pero estos protestaron.

—¡Se van a dar cuenta! —grito William

—¡Ya están sospechando! —exclamo Alfredo

Los gritos llamaron la atención de algunos miembros cercanos y pronto se reunieron todos para tratar de comprender lo que estaba sucediendo, a lo que Scott tuvo que pronunciarse.

—No es nuestro plan ocultarles nada —dijo tratando de calmar los ánimos —. Apenas sabemos poco más que ustedes y es de nuestro interés tratar de entender lo que está pasando pero, lo que sea que produjo el gran estruendo que todos escuchamos, ha destruido la nave en la que llegamos.

Scott no pudo continuar hablando debido a los murmuros que pronto se convirtieron en agrias quejas infundadas pues, realmente nadie sabía lo que sucedía. Entonces esperó para dar el golpe final.

—Ahora que saben lo mismo que yo, tendrán que colaborar para conseguir más información. Hemos dejado una baliza en el lugar del incidente y queremos ir a investigar y de preferencia, recuperar todo lo que sea posible. Porque lo que destruyo la nave, fue otra igual a la nuestra.

El silencio dominó la sala por primera vez y Scott pudo pensar en lo siguiente que diría. Ya no le importaba cómo reaccionarían, pero esperaba que sean cooperativos. Era difícil determinar si ha ocurrido algo en la tierra o han sido abandonados a su suerte y probablemente las respuestas estén en los escombros de la nave.